El presidente del equipo Guadalajara, Néstor de la Torre, entregó hoy a su contraparte de Atlas, Gustavo Guzmán, las llaves y el automóvil que sus jefes apostaron, con lo cual Chivas paga el desafío a Zorros.
Ricardo Salinas Pliego, dueño del cuadro rojinegro, y Jorge Vergara, propietario de los rojiblancos, lanzaron una apuesta, pero luego del triunfo de Zorros por 1-0, se desató una supuesta confusión en el desafío y después de algunos "reclamos" velados, el perdedor anunció: "Chivas nunca se raja. El Mini Cooper será entregado".
"Solamente quiero reiterar que Chivas cumple, hacemos honor a las palabras y Jorge Vergara está mandando aquí el carro", empezó a decir Néstor de la Torre en el acto desarrollado en las instalaciones del estadio de Chivas.
Comentó que "estamos aquí aceptando que perdimos, con un poquito de fortuna para los contrarios", y confió en el desquite porque "vienen más clásicos".
A su vez, Gustavo Guzmán expresó que "Cruz Rosa (rosa por la campaña contra el cáncer de mama) tendrá un donativo de dinero equivalente a este auto, y esta unidad la vamos a rifar el sábado en el partido ante Toluca, y todos contentos, todos felices y más feliz el Atlas porque la afición es la que va a disfrutar de este auto".
La sorpresa para los atlistas es que dicho auto está pintado en rojiblanco, en lugar de rojinegro, aunque en la parte trasera tiene el letrero: "Gané el clásico tapatío Chivas-Atlas".
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