La derrota en Pachuca fue sólo un tropiezo. Atlas retomó el camino de la victoria al imponerse esta noche por la mínima diferencia a Mineros, para llevarse la serie (3-1 global) y mantenerse como líder de Grupo con 12 unidades.
Los Zorros están a nada de asegurar su pase a la siguiente ronda. Definen el liderato en la última llave ante UdeG, sublíder del pelotón con 7 puntos.
Sabedores de que se jugaban su última carta del torneo en el Jalisco, Mineros intentó dañar al cuadro rojinegro. Los zaocatecanos intentaron proponer y buscar el arco local con un buen manejo de esférico.
El panameño Alberto Quintero era el hombre más dinámico e incisivo en el ataque visitante. Atlas carecía de intensidad y su medio campo flotaba. Edson Rivera y Edy Brambila no entraban en acción y en el eje del ataque Luis Caballero era un cero a la izquierda.
El duelo cayó en un choque constante en medio campo e innumerables errores. Los Zorros no carburaban y eso provocó la rabieta de Tomás Boy quien se levantó en un par de ocasiones para regañar a sus pupilos.
La única opción de peligro del primer tiempo fue por conducto de Edy Brambila, cuando se creó el espacio y en los linderos del área sacó un zurdazo potente y colocado que Lupe Martínez envió a tiro de esquina.
Para el complemento Tomás Boy intentó revolucionar a su equipo con el ingreso de Maikon Leite. El brasileño de inmediato le imprimió velocidad, desequilibrio y picardía a los Zorros.
El 10 de Atlas coqueteó con el gol a los ocho minutos de ingresar a la cancha; tras un largo servicio desde la izquierda, Leite controló la esférica con el pecho, enfiló en una diagonal, se quitó a dos zagueros y, en los linderos del área probó con un derechazo cruzado que pasó rosando el poste derecho de Martínez.
La presencia de Leite y posteriormente de Jahir Barraza dieron más ponch al Atlas. Justamente éste último tuvo la oportunidad de mover las redes, pero su zurdazo de volea en el área chica fue demasiado cruzado.
Mineros ya no intimidaba a la zaga rojinegra. Fue un error de Giovanni León el que les abrió la puerta para marcar. El joven defensor retrasó el balón a su arquero, pero no se percató que en esa zona se encontraba Tony López, quien encaró a Fraga, pero perdió en el mano a mano.
Las ideas ya escaseaban para los locales. El duelo ya se encontraba en la recta final. A cuatro minutos del final Martín Barragán puso cifras definitivas al empujar en la línea de gol un servicio desde la izquierda de Juan Hernández.
Fuente: Milenio
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