De cara al Clásico Nacional, Omar Bravo y Ángel Reyna se acercaron este viernes a la afición del Rebaño en una firma de autógrafos organizada por dos de los patrocinadores del equipo.
El Capitán y el "10" de Chivas atendieron a poco más de 200 aficionados durante poco más de una hora. Como era de esperarse, las camisetas rojiblancas y los buenos deseos para el encuentro del domingo no se hicieron esperar.
Reyna escuchó atento a la solicitud de un grupo de niños que le pidieron la victoria en en el Omnilife, aunque el atacante no podrá participar pues aún se recupera de una lesión que sufrió ante los Esmeraldas de Leon.
Bravo, por su parte, admitió cierta inquietud porque llegue la hora del juego.
"Con un poquito de ansiedad, al igual que los aficionados. Con ganas de que empiece el juego, seguramente será muy parejo y quien esté más concentrado tendrá posibilidades de ganar", comentó el delantero del conjunto tapatío.
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